Versiones creativas de Crème brûlée para sorprender en tu restaurante
El crème brûlée es un postre que cuenta con un largo historial: la leyenda sostiene que fue creada en 1691 por François Massialot, el cocinero oficial del duque Luis Felipe de Orleans. La receta fue plasmada posteriormente en el popular libro de edición francesa llamado Nouveau cuisinier royal et bourgeois.
A través del tiempo, esta preparación sufrió algunas modificaciones pero hay una característica que se mantiene: su capa crujiente superior, que se rompe al golpe de cuchara, y como contraste la crema cremosa que aparece debajo de ella. En este artículo te contamos cómo preparar una crème brûlée de forma fácil y con un sabor irresistible.
El clásico postre francés, fácil de hacer
Uno de los beneficios de este postre es que es versátil y se puede combinar con otros ingredientes para darle distintos sabores. Aquí te contamos algunos trucos para preparar este postre de forma sencilla:
La receta tradicional de este postre incluye cuatro ingredientes básicos (leche, huevos, azúcar y vainilla) y consta de varios pasos. El primero es mezclar y cocer los ingredientes. Luego de esto, le sigue el horneado y, en último lugar, un acabado final de azúcar quemado para lograr la capa crujiente de caramelo.
Sabemos que este paso a paso es largo y que puede tornarse arduo al preparar este postre de forma estandarizada y en cantidad. Para agilizar la elaboración de esta receta, puedes probar versiones de mezclas de crème brûlée pre hechas que garantiza una preparación en sólo 10 minutos, sin necesidad de cocción. ¡Bate, flamea y sirve! Existen varias marcas de mezclas de crème brûlée disponibles que pueden identificar con su suplidor o a través del internet.
Ofrecer crème brûlée en tu servicio de restaurante o catering puede resultar una gran idea debido a su gran practicidad, pudiendo prepararla directamente en la vajilla en la que llegará a los comensales. Partiendo de la misma mezcla de crème brûlée, podrás elaborar distintas variedades, como chocolate, limón o berries. Conoce algunos trucos más para preparar estos postres para eventos en este artículo.
Crème Brûlée de chocolate
Con una misma base puede crear varios postres, incluso manteniendo el formato: una opción que puede llamar la atención de tus comensales es una crème brûlée de chocolate. ¿Cómo hacerla? Con estos simples pasos:
En el recipiente de la batidora, agregue la leche a temperatura ambiente o fría.
A continuación, añadir la mezcla de crème brûlée y dejar hidratar en reposo 1 minuto.
Batir por 1 minuto a velocidad baja y 5 minutos a velocidad alta
Agregar la crema de leche y batir 2 minutos a velocidad alta.
Añadir el chocolate previamente fundido, batir en velocidad máxima hasta homogeneizar.
Vierta en moldes, refrigerar por media hora como mínimo. Espolvoree una cucharada de azúcar en cada recipiente y queme antes de servir.
Crème Brûlée de manzana, limón o berries: otras alternativas
Una de las principales ventajas de ofrecer crème brûlée en el menú es su gran capacidad de adaptarse a todo tipo de ingredientes (tanto dulces como salados).
Crème Brûlée de naranja: los cítricos maridan a la perfección con este postre. Puede probar también haciendo un crème brûlée de limón o una de lima y jengibre.
Crème Brûlée de berries: esta versión resulta ideal para servir en eventos y ofrecer en su servicio de catering, ya que colocando algunas frutas frescas arriba de la capa crujiente logrará un emplatado muy atractivo.
Crème Brûlée de manzana: si busca una opción para servir durante todo el año, esta preparación puede ser la mejor aliada debido a que esta fruta puede conseguirse en las cuatro estaciones.
Crème Brûlée de queso: esta preparación sorprenderá a los clientes: podrá optarse por utilizar queso mascarpone, queso crema o queso azul, entre otras variedades.